Camino santiago albergue
Desglosando Camino santiago albergue
La pista se abre paso por un terreno abierto, sembrado de campos de cereal, vides y olivos desperdigados y bajo el parque eólico de la sierra de Salajones. Sin fuertes repechos, pero en continuo ascenso, se avanza durante seis kilómetros hasta el alto de Aibar, que coronamos tras un túnel.
Al tratarse de un epílogo al trazado jacobeo propiamente dicho, existe la posibilidad de partir desde Santiago de manera directa hacia Fisterra y después proseguir a Muxía o realizar el camino pasivo. Este es el conocido Camino a Fisterra.
Por un pequeño bosque de coníferas bajamos hasta una pista agrícola que conduce a Izco, entrando así en el valle de Ibargoiti. A las puertas de Izco nos recibe un crucero moderno y un panel informativo del valle y sus poblaciones. La señalización lleva hasta la plaza.
Bajamos así hasta el puente del río Ultzama y la ermita de la Trinidad de Arre, que aún luce su ábside románico. OJO, Al salir de Irotz hay una variación señalada que va por un camino fluvial mas que no pasa ni por Zabaldika, con su iglesia y su albergue, ni por el puente de Trinidad de Arre.
Sin cruzarlo, dejamos esta localidad de servicios a mano derecha y continuamos rectos por una carretera local en dirección a Arrés, dejando a la izquierda la carretera A-ciento treinta y dos que se dirige a Huesca. Más adelante, un poste de madera balizado con la indicación Camino santiago albergue.
Cogemos una pista y a los setecientos metros dejamos a un lado el sitio donde se situaba la Venta del Puerto, vieja posada de la que hoy no quedan más que restos. Después la bajada se hace más patente, nos lleva a abrir y cerrar un par de portillos y nos sorprende con algún tramo de peldaños.
El siguiente tramo no defrauda en lo más mínimo. Resguardados entre árboles y matorral vamos en busca del río Arga y solventamos un rápido descenso hasta la misma ribera, llegando casi a rozar el agua. Pegados al cauce llegamos hasta el puente de Zuriain.
Enseguida, antes del punto larguísimo 288 de la N-240, se cruza la carretera y se deja por la derecha. Más adelante se vuelve a cruzar para coger un camino que llega hasta el acantilado de Atarés, que salvamos por una pasarela acondicionada en el Año Santo.
El Camino Portugués se compone por una ruta normalmente llana y transitable todo el año, discurre entre acantilados, montes y estuarios. Se inicia en la esencial urbe de Oporto y atraviesa ciudades como Póvoa de Varmiz, Viana do Costelo, etc.
Tras el barranco nos encontramos pronto con otro curso de agua que baja por el barranco Calcones. Una vez superado por otra pasarela afín encaramos una corta subida y ya por terreno conveniente enlazamos con una pista pavimentada.
Otros motivos por lo que efectuar el Camino de Santiago pueden ser por motivos deportivos, para ponerse en forma, para conocer gente nueva, como un reto personal, para recobrar la voluntad o simplemente para desconectar de la rutina.
Ha sido declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, Recorrido Cultural Europeo por el Consejo de Europa y ha recibido el título honorífico de Calle mayor de Europa. Muchos son los símbolos que distinguen al Camino santiago albergue, pero sin duda el más conocido es la Cruz de Santiago y la concha.
La presencia de ciertos búnker de hormigón y el desafiante panorama de nuestra derecha, con múltiples moles pirenaicas alzándose sobre el campamento de Rioseta, facilitan la travesía hasta toparnos con la chimenea de la fundería del Anglasé.
A los peregrinos que realizan el Camino de Liébana se les llaman como cruceros por el hecho de que, los primeros romeros en realizarlo, peregrinaban con la pretensión de admirar el trozo de la Cruz de Cristo recuperada por Toribio de Astorga en Tierra Santa.