Albergue goikuria sarria
Desglosando Albergue goikuria sarria
De las frondosas laderas del monte Samitier se desciende a un mar de cereal surcado por pistas agrícolas y que convive junto a un paisaje de badlands y barrancos formados por la erosión del agua. El trayecto descarta el paso por la localidad de Martes y, ya en la provincia de Zaragoza.
Apenas recorridos 800 metros se rodea la planta excavada del hospital de Santa Cristina, reconocido hospital de peregrinos fundado en la Baja Edad Media. Tras dejar la estación invernal de Candanchí a mano derecha se cruza la N-trescientos treinta.
La cruz de la ciudad de Santiago es una cruz latina simulando una espada, con forma de flor de lis en la empuñadura y en los brazos. La tarta de Santiago es el postre más propio de la pastelería gallega. Está elaborado con harina, azúcar, huevos, almendras molidas, ralladura de limón y azúcar tafetán.
Se les llama peregrinos al viajero que, por devoción o por voto, visita un santuario o algún lugar considerado sagrado. El nombre de peregrinos, surge en Compostera por el hecho de que el recorrido se realiza per agrum, o sea, por el campo Albergue goikuria sarria.
Una senda trazada sobre la carretera y con vistas al pueblo de Lumbier nos lleva a bajar velozmente por la ladera de la montaña. Prosigue guiándonos entre un pequeño pinar, a cuya salida abrimos un portillo para entrar en una pista. Más adelante, pasado un paso canadiense en la zona del barranco Basobar.
Cogemos una pista y a los setecientos metros dejamos a un lado el sitio donde se ubicaba la Venta del Puerto, vieja posada de la que hoy no quedan más que restos. Después la bajada se hace más patente, nos lleva a abrir y cerrar un par de portillos y nos sorprende con algún tramo de escalones.
Una vez superado se sale a la carretera que sube hasta Atarés y, atención, la tomamos hacia la derecha. Nos conduce a un camino que comenzamos llaneando para derivar en un tramo con un perfil más acusado que alcanza el mirador de la Canal de Berdún.
Junto a la iglesia de Santa María, testigo mudo del paso de millones de peregrinos a lo largo de la historia, se cruza por última vez el río Aragón para subir a Rocaforte. Entonces, pistas y rutas dibujadas entre las sierras de Aibar y Salajones toman la iniciativa para coronar el primer alto.
Junto al puente se encuentra el bar y el albergue La Parada de Zuriain, que se inaugurará en dos mil catorce. Salimos a la N-ciento treinta y cinco y proseguimos con cuidado unas rodadas junto al arcén. Cogemos el desvío de Ilurdotz y volvemos a cruzar el Arga para dirigimos hasta Irotz.
Al tratarse de un epílogo al trazado jacobeo propiamente dicho, existe la posibilidad de partir desde Santiago directamente hacia Fisterra y luego seguir a Muxía o efectuar el camino pasivo. Este es el conocido Camino a Fisterra.
Una señal de madera y un mojón jacobeo labrado con las distancias a Santiago de Compostela y Undués de Lerda, última población aragonesa, alienta a dar el paso inicial. A continuación se bajan unas escaleras que se hallan al lado del mojón.
Accedemos así a la calle Mayor de Villava, cuna de Miguel Indurain Albergue goikuria sarria. Los que quieran pernoctar en el albergue de Villava deberán desviarse a la izquierda hacia mitad de la calle. Está a la perfección señalizado. A la salida cruzamos la carretera y seguimos de frente, pasando múltiples glorietas, hasta enlazar con Burlada.
El Camino Portugués se trata de un camino diferente, no hallamos mesetas, alturas difíciles ni marcados desniveles, mas sí podremos disfrutar de bosques y cruceros milenarios que ocultan bajo sus mantos los cantares de los antiguos trovadores.
Enseguida, ya antes del punto larguísimo doscientos ochenta y ocho de la N-doscientos cuarenta, se cruza la carretera y se deja por la derecha. Más adelante se vuelve a cruzar para coger un camino que llega hasta el acantilado de Atarés, que salvamos por una pasarela adecuada en el Año Beato.